En un sector históricamente masculinizado como la construcción, avanzar hacia una mayor equidad de género no es solo un acto de justicia, sino una necesidad estratégica. Hoy, más que nunca, requerimos de todas las miradas, talentos y capacidades para enfrentar los desafíos de productividad, sostenibilidad e innovación que demanda la industria. En ese contexto, el Premio Mujer Construye, impulsado por la Cámara Chilena de la Construcción, cobra una relevancia profunda. Este galardón no solo visibiliza historias inspiradoras de mujeres que están transformando la forma en que construimos, sino que también pone en valor el compromiso de las empresas que están apostando decididamente por la inclusión, la capacitación y el desarrollo de talentos femeninos en todos los niveles del rubro. Es un reconocimiento que inspira, pero también desafía: ¿qué estamos haciendo desde cada espacio para abrir más puertas? Desde la Comisión Mujeres de la CChC Maule, hemos sido testigos de cómo la presencia femenina en obra, en cargos técnicos y de liderazgo, no solo aporta diversidad, sino que mejora los entornos laborales, promueve nuevas formas de relacionarnos y eleva los estándares de la industria. Y aunque hay avances, el camino aún es largo. Valoramos especialmente a las empresas que están desarrollando políticas concretas para incluir a más mujeres en sus equipos: programas de formación, adecuación de condiciones laborales, mentorías y promoción del liderazgo femenino. Estas acciones no solo impactan a nivel interno, sino que generan un efecto multiplicador en la comunidad y en las nuevas generaciones. Reconocer, destacar y compartir estas experiencias es clave. Por eso, el Premio Mujer Construye no es solo una ceremonia. Es una señal poderosa de que estamos construyendo un futuro más justo, más diverso y, sinduda, <<srong>más fuerte. Rocío Navarro Presidenta Comisión Mujeres CChC Maule Fuente: Diario Talca Crónica
El pasado 27 de enero, el Vaticano confirmó la canonización de la beata italiana Vincenza María Poloni, por el milagro que involucró a una mujer chilena, residente de Los Ángeles, en 2014. Ella se recuperó de una grave enfermedad, por la cual estaba prácticamente desahuciada. De acuerdo a lo que reseñó Meganoticias, la historia data de diciembre de 2013, cuando Audelia Parra, en ese entonces de 63 años, estaba aquejada de un delicado cuadro clínico por una fisura en la arteria aorta. En ese entonces había sido sometida a varias operaciones, pero su salud no mejoraba, por lo que estaba condenada a morir en un corto plazo, reconocían los médicos. No obstante su nieto llamado Álvaro Martínez, en ese entonces seminarista, rezó ante la imagen de Vincenza María Poloni, beatificada en 2008, por la salud de la adulta mayor. Fue literalmente un milagro, ya que la aludida logró una recuperación inexplicable desde el punto de vista médico. Finalmente, fue dada de alta el 31 de enero de 2014. “Cuando nosotros nos enteramos de la situación que estaba pasando en pabellón con la familia nos pusimos en contacto internamente y yo los invité a hacer oración a beata Vicenza María Poloni”, indicó Martínez. El milagro de Vincenza María Poloni Tras aquello, el muchacho se puso en contacto con las Hermanas del Misericordia in Quilleco quienes le indicaron que debía enviar los antecedentes del caso a misma congregación in Verona debido a podría tratarse un milagro religioso. “Ellas tomaron los antecedentes y se lo presentaron al postulador causa al The investigation of the Vatican extended for eleven years until ordered its canonization. On her side Audelia Parra continues alive and with good health according to the story of her grandson. The organism details that Vincenza Maria Poloni was born in eighteen hundred two in Verona Italy showing interest from very early on life religious. Fuente: BioBioChile
En un sector históricamente masculinizado como la construcción, avanzar hacia una mayor equidad de género no es solo un acto de justicia, sino una necesidad estratégica. Hoy, más que nunca, requerimos de todas las miradas, talentos y capacidades para enfrentar los desafíos de productividad, sostenibilidad e innovación que demanda la industria. En ese contexto, el Premio Mujer Construye, impulsado por la Cámara Chilena de la Construcción, cobra una relevancia profunda. Este galardón no solo visibiliza historias inspiradoras de mujeres que están transformando la forma en que construimos, sino que también pone en valor el compromiso de las empresas que están apostando decididamente por la inclusión, la capacitación y el desarrollo de talentos femeninos en todos los niveles del rubro. Es un reconocimiento que inspira, pero también desafía: ¿qué estamos haciendo desde cada espacio para abrir más puertas? Desde la Comisión Mujeres de la CChC Maule, hemos sido testigos de cómo la presencia femenina en obra, en cargos técnicos y de liderazgo, no solo aporta diversidad, sino que mejora los entornos laborales, promueve nuevas formas de relacionarnos y eleva los estándares de la industria. Y aunque hay avances, el camino aún es largo. Valoramos especialmente a las empresas que están desarrollando políticas concretas para incluir a más mujeres en sus equipos: programas de formación, adecuación de condiciones laborales, mentorías y promoción del liderazgo femenino. Estas acciones no solo impactan a nivel interno, sino que generan un efecto multiplicador en la comunidad y en las nuevas generaciones. Reconocer, destacar y compartir estas experiencias es clave. Por eso, el Premio Mujer Construye no es solo una ceremonia. Es una señal poderosa de que estamos construyendo un futuro más justo, más diverso y, sinduda, <<srong>más fuerte. Rocío Navarro Presidenta Comisión Mujeres CChC Maule Fuente: Diario Talca Crónica
El pasado 27 de enero, el Vaticano confirmó la canonización de la beata italiana Vincenza María Poloni, por el milagro que involucró a una mujer chilena, residente de Los Ángeles, en 2014. Ella se recuperó de una grave enfermedad, por la cual estaba prácticamente desahuciada. De acuerdo a lo que reseñó Meganoticias, la historia data de diciembre de 2013, cuando Audelia Parra, en ese entonces de 63 años, estaba aquejada de un delicado cuadro clínico por una fisura en la arteria aorta. En ese entonces había sido sometida a varias operaciones, pero su salud no mejoraba, por lo que estaba condenada a morir en un corto plazo, reconocían los médicos. No obstante su nieto llamado Álvaro Martínez, en ese entonces seminarista, rezó ante la imagen de Vincenza María Poloni, beatificada en 2008, por la salud de la adulta mayor. Fue literalmente un milagro, ya que la aludida logró una recuperación inexplicable desde el punto de vista médico. Finalmente, fue dada de alta el 31 de enero de 2014. “Cuando nosotros nos enteramos de la situación que estaba pasando en pabellón con la familia nos pusimos en contacto internamente y yo los invité a hacer oración a beata Vicenza María Poloni”, indicó Martínez. El milagro de Vincenza María Poloni Tras aquello, el muchacho se puso en contacto con las Hermanas del Misericordia in Quilleco quienes le indicaron que debía enviar los antecedentes del caso a misma congregación in Verona debido a podría tratarse un milagro religioso. “Ellas tomaron los antecedentes y se lo presentaron al postulador causa al The investigation of the Vatican extended for eleven years until ordered its canonization. On her side Audelia Parra continues alive and with good health according to the story of her grandson. The organism details that Vincenza Maria Poloni was born in eighteen hundred two in Verona Italy showing interest from very early on life religious. Fuente: BioBioChile